Muere electrocutado otro alimoche

Un nuevo alimoche puesto en libertad en el marco del proyecto LIFE Egyptian vulture ha sufrido daños por electrocución. Se trata de Pina, un ejemplar que en su corta vida contó con el apoyo de muchos voluntarios que la siguieron paso a paso, pero que no pudieron hacer nada para evitar esta horrible muerte. Pina fue puesta en libertad en Basilicata en mayo de 2022, a la edad de un año. Tras permanecer un par de semanas en la zona de liberación, se había trasladado al extremo sur de Salento, en Apulia. Poco después de que el GPS indicara su ubicación en la localidad de Castro Marina, provincia de Lecce, se supo que el animal estaba en apuros y se alertó a varios lugareños.

El 3 de junio, Pina fue rescatada en la terraza de un edificio por el guarda del zoo, Antonio Umberto Fedele, en colaboración con los Carabinieri Forestali de Otranto y, posteriormente, fue entregada al Centro Recupero Animali Selvatici (Centro de Recuperación de Animales Salvajes) de Calimera, provincia de Lecce, donde recibió los primeros cuidados. Gozaba de una salud razonablemente buena a pesar de estar muy delgada y hambrienta. Se la trasladó de inmediato al CRAS de Matera, donde la joven alimoche se recuperó rápidamente, hasta el punto de que el 25 de julio de 2022 fue puesta en libertad de nuevo en el parque de la Murgia Materana.

Tras la segunda puesta en libertad, Pina se desplazó hacia el norte de Basilicata, Apulia, Abruzos y Molise, lo que demostraba, esta vez, que se había adaptado bien a la vida silvestre. Del 5 al 28 de agosto, frecuentó principalmente una zona entre Abruzos y Molise, donde un grupo de ornitólogos la observó, la fotografió y le dio comida (Giulia Pace, de la Estación Ornitológica de Abruzos, y Nicola Norante, del Grupo Molise de Estudios Ornitológicos).

Desde el 28 de agosto, Pina se trasladó a Campania, y del 30 de agosto al 3 de septiembre permaneció en el parque del Cilento, donde un voluntario le proporcionó comida adicional (Alfredo Galietti, de la Asociación Ardea).

El 3 de septiembre, Pina comenzó a emigrar decididamente hacia el sur y, tres días después, había llegado a Sicilia. Desde el 23 de septiembre, se instaló en la parte occidental de la isla y aquí se benefició de los dos comederos cercanos que habían instalado ISPRA y la Asociación CERM en Campobello di Mazara, provincia de Trápani. Desgraciadamente, el 24 de diciembre los datos del GPS indicaron una anomalía que hizo sospechar de una posible electrocución tras comprobar las imágenes por satélite de la zona.

Un voluntario, Enzo Sciabica, realizó una inspección que, por desgracia, confirmó la hipótesis. Lo que provocó la muerte de Pina fue un poste de derivación de una línea eléctrica de media tensión (lamentablemente no incluida entre las que fueron aisladas, en una primera fase, por E-Distribuzione como parte de la medida C.4 del proyecto LIFE Egyptian vulture). Los Carabinieri Forestali intervinieron entonces para recuperar el cadáver del alimoche, que fue entregado al Instituto Zooprofiláctico Experimental de Palermo para una necropsia.

Ya son cuatro los alimoches puestos en libertad que, con certeza, han muerto electrocutados. Se sabe que la electrocución se cobra miles de víctimas entre las aves cada año, pero solo el uso de dispositivos GPS permite identificar los casos y encontrar los cadáveres.

La tipología de las estructuras de las líneas de media tensión en Italia favorece esta mortalidad y solo las intervenciones de aislamiento a gran escala pueden paliar este grave fenómeno. Para los implicados en el proyecto LIFE Egyptian vulture, 2022 será recordado como un año fatídico en el que las amenazas más temibles para la conservación del alimoche no perdonaron a ninguno de los jóvenes ejemplares puestos en libertad.

El cuerpo de Pina en la base del poste de derivación que le causó la muerte (foto de E. Sciabica)
El poste de derivación, altamente peligroso para la avifauna, que causó la muerte de Pina (foto de E. Sciabica)

Life Egyptian Vulture