En las Islas Canarias, la subespecie endémica “guirre” (Neophron percnopterus majorensis) era muy abundante en el archipiélago hasta los años 50 del siglo pasado (cerca de 400 ejemplares), cuando comenzó un declive consistente (-68%) que ha reducido su presencia a las islas de Fuerteventura y Lanzarote (y los islotes limítrofes).

A partir de 1998 la población comenzó a registrar cierto incremento: de 23 territorios se pasó a 67 territorios en 2017 (61 en Fuerteventura y 6 en Lanzarote) y hay más de 300 ejemplares censados.
El «guirre canario» está incluido en el Catálogo Español de Especies Amenazadas y en el Catálogo Canario de Especies Protegidas, en la categoría “En peligro de extinción».
